martes, 13 de febrero de 2007

Los amigos

Hace poco estuve hojeando los fresquísimos cuentos de Henry Miller en su Libro de amigos (Book of friends) y me quedé felizmente maravillada de como para todo ser humano la amistad es una experiencia deliciosa (y dolorosa también para equilibrar el yin y el yang)

Cito una fragmento, nítido en su sentimiento y hermoso en su expresión; Miller clama:
"Una vida sin amigos, no es vida. Y cuando digo amigos, quiero decir amigos. No cualquiera, ni todo el mundo puede ser tu amigo. Debe ser alguien tan cercano como tu propia piel, alguien que le de color, drama y significado a tu vida, algo que es el otro lado del amor y aún así incluye el amor. Un amigo te puebla de un millón de ojos, ves en otras dimensiones. A través de un amigo vives vidas incontables. Nunca estás solo, nunca lo estarás"

Pienso en esa misión de los amigos, que sin querer se nos meten en la piel, se nos instalan en el corazón y ya nunca más volvemos a ser los mismos, después de haberlos dejado pasar.

Río al confirmar las palabras de Miller y recordar todos los episodios "coloridos y dramáticos" que me han provocado mis amigos, pero sobretodo agradezco todos aquellos momentos pequeños que "significaron mucho" porque ellos andaban por ahí.

¡Qué pobres serían nuestras vidas sin ellos! Sólo podríamos vivir una vida, la nuestra. Podríamos ser una cosa, ir a ciertos lugares, amar ciertas ideas. Pero ellos hacen posible que nuestro mundo se ensanche, nuestras pasiones se multipliquen y seamos mejores finalmente.

Gracias a la vida por los amigos. Que estemos cortos de dinero, de ideas; hasta de amor pero jamás de amigos